La vuelta

Este ha sido mi paisaje, mi mirada. Durante algo más de un mes he pasado mis vacaciones, como siempre, en Salobreña. Bajo esa sombrilla colorida, sumergido en ese agua cristalina y bañado por el sol más bonito del mundo, he pensado, leído (mucho), escrito y, sobre todo, he pasado los mejores ratos del verano.

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Hoy es el último día de agosto y, ya de vuelta, me quedo con lo mejor de todo: mis amigos, todos y cada uno de los que habéis pasado a hacerme una visita (también con los que no habéis podido). Por esa sombrilla y por el jardín de la casa de mi mujer en la playa, habéis pasado "a ver a Fernando". Gracias, hemos pasado momentos muy buenos.

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Y ahora nos queda un curso por delante, tando a nivel escolar como político: el curso escolar comienza mañana sin vacunas, estrenando ley de educación y con la entrada de los alumnos/as adelantada dos días (por eso de la calidad, o mejor, por eso de la cantidad). El curso político se inicia calentito, y no del calor que hace, sino por las tropelías de nuestro desgobierno. Poco a poco iré desglosando cada una de las mentiras, desvergüezas y sinrazones que cada día he leído y leeré en la prensa: la utilización partidista de los estamentos del Estado, el PER a nivel nacional, el lío monumental de la gripe A, la subida de impuestos, etc.

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En fin, queridos lectores y lectoras, se acabaron las vacaciones. A partir de ahora prometo que escribiré más y desde hoy doy paso a que me podáis hacer comentarios.

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¡ Feliz vuelta !