lunes, 17 de septiembre de 2012

Valderas a lo suyo: sillón y coche oficial

Los socios radicales son refractarios a la verdad en la trama de los ERES falsos porque ésta conduce inexorablemente a poner en evidencia los enjuagues y acuerdos impublicables de su pacto oculto de gobierno. Griñán y Valderas son los máximos responsables de la manipulación de toda prueba que conduzca a esclarecer las actuaciones de todos los miembros de la pirámide de corrupción y de su cúspide, que llega a San Telmo y la mesa del Consejo de Gobierno.

El presidente de la Cámara de Cuentas, Antonio López, debe dar cuenta en el Parlamento de Andalucía de las modificaciones del informe sobre los EREs falsos que apunta directamente a la responsabilidad de Chaves y de Griñán. Resulta inaudito que en una democracia avanzada se presione y se llegue a distorsionar el sentido de un informe de un organismo de control para beneficiar a quien tiene que ser controlado.

La indignidad del bipartito en la investigación de la trama de los ERES falsos es otra de las grandes rémoras para la imagen y crédito de Andalucía: resisten porque lo que tiene que resistir es el pacto de sillones y de coches oficiales.

La metamorfosis de Valderas le ha convertido en el actor principal de esta farsa en la que ahora dice haber descubierto la honradez de Griñán: faltaría más.

viernes, 14 de septiembre de 2012

Rescate andaluz, pero de cuánto hablamos...

La degradación de la vida política a la que el bipartito ha conducido a Andalucía en seis meses de gobierno hace inaplazable que el rescate económico vaya acompañado de otro integral que regenere las instituciones y destierre la mentira y el despilfarro de la vida pública.

Griñán y Valderas son los directos responsables de agravar la situación de emergencia económica al ocultar deliberadamente el alcance del agujero negro de las cuentas andaluzas tras treinta años de gobiernos socialistas.

El bipartito debe decir la verdad sobre el déficit en lugar de enredarse en debates semánticos y de proseguir con su estrategia cansina de confrontación con el Gobierno de España. Además debe aclarar cuánto debe a los bancos y dejen de mantener en secreto lo que tienen el derecho a conocer todos los andaluces.

El Gobierno de España trata a todas las autonomías por igual y la adhesión al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) sólo tiene la condición de que se ajuste a la ley y que responda a una realidad objetiva, sin maquillajes contables ni falacias financieras.

A nadie en su sano juicio se le ocurriría insultar ni acusar de tenernos manía al director de un banco que no nos conceda un crédito porque no sepa el estado real de nuestra economía. Eso es lo que está haciendo el bipartito y sus acólitos: sembrar de dudas las intenciones de los demás cuando lo que genera dudas siderales es la certeza de su insolvencia e insinceridad.

martes, 4 de septiembre de 2012

Andalucía in-contable...

La falta de transparencia, el descontrol financiero y las fullerías contables del bipartito son los grandes lastres que imposibilitan que Andalucía pueda afrontar con garantías mínimas de éxito su salida de la actual situación de emergencia económica y social.

Griñán debe decir de una vez por todas cual es el estado real de las cuentas andaluzas en lugar de recurrir a excusas de escaso fondo económico como que necesitan liquidez: es la consecuencia directa del despilfarro institucionalizado.

El bipartito ha recurrido a la estrategia de maquillar su rescate ante la situación de colapso financiero y de quiebra económica a la que le han llevado sus trampas contables, su nefasta gestión económica y su contumaz negativa a adelgazar el monstruo burocrático que ha creado.

Los andaluces no pueden estar al albur de los cambios de humor económicos de Griñán y de Valderas, ni de que uno diga una cosa y otro su contraria: la economía andaluza no resiste las ocurrencias oportunistas del bipartito.

El PSOE e IU son un riesgo para que Andalucía pueda afrontar con solvencia la salida de la crisis mientras sus únicos argumentos sean echarle la culpa de su morosidad e insolvencia a todo lo que se mueva que no sean ellos mismos, hasta a los bancos.

El discurso victimista y antisistema del bipartito radical sólo conduce a más morosidad, más desprestigio exterior y más riesgo para el Estado del Bienestar en Andalucía.

La irresponsabilidad del bipartito es aún mayor porque es su respuesta al Gobierno que más cree y que más ha ayudado a las autonomías como parte esencial del Estado y como instrumento básico en la prestación de los servicios sociales básicos.

La confrontación ha sido la única respuesta de Griñán a que, entre otras aportaciones nada desdeñables, el Gobierno de España haya asumido el pago de 5.400 millones de euros a las PYMES andaluzas: los adeudados por los ayuntamientos y la Junta.

viernes, 17 de agosto de 2012

Cien días de fracaso

Se han cumplido los cien primeros días de la segunda legislatura de José Antonio Griñan como presidente de la Junta de Andalucía. Por segunda vez, los andaluces estamos gobernados por un presidente que no ha aprobado el examen de las urnas. En su primera legislatura, la del dedazo de Chaves, se encontró con el sillón regalado. En esta segunda legislatura se ha convertido en un presidente que, en lugar de gobernar, se ha dedicado a repartir el poder entre los dos partidos que han perdido las elecciones autonómicas.

La hoja de ruta que ha marcado el presidente de la Junta en sus primeros cien días de gobierno nos da una idea de los derroteros que va a tomar el gobierno andaluz en esta legislatura, dure lo que dure. Ese “otro camino” que nos quiere vender la propaganda socialista no es más que una involución a los peores años del ‘chavismo’ en Andalucía.

Griñán preside el gobierno más radical de la historia de la autonomía. Y digo preside porque sin duda Griñán, aunque presida, no lidera. Tras el pacto de perdedores que han configurado PSOE e IU, las decisiones del gobierno andaluz quedan supeditadas al sostenimiento de un pacto postelectoral. Griñán ha convertido a la sociedad andaluza en un rehén del gobierno bipartito.
En Andalucía padecemos un gobierno autonómico que actúa con la soberbia de un sistema de partido único: no hagamos nada para que todo permanezca como está. El gobierno de España, presidido por Mariano Rajoy, ha tomado las decisiones más difíciles y más necesarias para el interés general y el progreso, que probablemente haya tomado un gobierno en la España democrática. Sin embargo, el bipartito Griñán-Valderas ha optado por la confrontación partidista, la deslealtad institucional y la obsesión electoralista. Gobernar no puede ser un ejercicio permanente de propaganda falsa cuyos frutos son la decepción y la erosión de la política y la democracia.
Es lo que ha ocurrido con la aprobación de un supuesto Plan de Empleo que el presidente nos anunció en el discurso de investidura, sin preocuparse de analizar las causas del fracaso de todos los planes de empleo de la legislatura anterior. Que la ‘medida estrella’ de este gobierno en sus cien primeros días sea un nuevo ‘Plan E’ para limpiar bosques en el que no se gastan ni un tercio del dinero defraudado en los ERE, es una desgracia para nuestra comunidad que ostenta el triste récord del 34 por ciento de su población activa en el paro.
En estos cien días no han aprobado ni una sola reforma en las políticas activas que favorezcan el empleo, sólo se han preocupado de poner en práctica medidas de carácter partidista y oportunista, para beneficio exclusivo de los miembros de Izquierda Unida y del PSOE.

domingo, 13 de mayo de 2012

15-M: 15-Mentiras
No son parte de la solución sino del problema. Sus propuestas pretendidamente revolucionarias, aplicadas como un programa compacto para la regeneración de la vida pública, en absoluto contribuirían a mejorar el sistema de libertades y el Estado del Bienestar en España. Al contrario. Aquellas que tienen un punto de sensatez, y que habían reivindicado por numerosas asociaciones cívicas antes de aquel 15-M, están siendo estudiadas o incluso aplicadas por el Gobierno de Rajoy. Por el contrario, las iniciativas que aparentan ser la piedra para la salvación de los ciudadanos conducirían a este país directamente al desastre y la quiebra: nos reducirían a una comunidad de parias dentro del concierto internacional de naciones. Sin más.

La historia de este fenómeno, devenido esencialmente en una plataforma antisistema y a la deriva, es la historia de un engaño. Bajo el legítimo objetivo de promover una democracia más participativa, tras la denuncia razonable de los vicios del bipartidismo PP-PSOE, más allá del rechazo hasta comprensible del desmedido dominio de grandes bancos y potentes corporaciones multinacionales, al otro extremo de la noble defensa de una auténtica división de poderes había y hay un colosal proyecto propagandístico orquestado por la izquierda extrema.

Los correligionarios del 15–M, muchos desde su ignorancia y por consiguiente de forma instintiva, han puesto en práctica principios clave en la manipulación de masas como el de la simplificación, el contagio, la exageración, la silenciación, la caricaturización o el principio de unanimidad. En efecto, han tratado a vastos grupos de personas como a un rebaño, haciéndoles creer que todas pensaban exactamente lo mismo porque estaban en posesión de una indiscutible verdad. Pero ha sido precisamente el recurso saturado a infinidad de técnicas goebelsianas el que ha hecho más descarnadas las 15 mentiras principales que van aparejadas a esta vanguardia de heroicos luchadores.


15-M: 15-Mentiras
1.- Es mentira que se esfuercen en proteger las raíces de la democracia. Las arrancan de cuajo y sin contemplaciones siempre que violan las leyes y disposiciones de las autoridades, algo que han hecho a menudo y enfundándose en un cínico victimismo.

2.- Es mentira que estén desligados de los movimientos antisistema. No propugnan la reforma del actual estado de cosas sino, por subversiva elevación, la destrucción del orden establecido para levantar otro: el clásico sueño utópico de no pocos totalitarismos.

3.- Es mentira que presenten herramientas concretas para el cambio. Simplemente han trazado unas líneas-fuerza y objetivos a conquistar, muchos inaceptables en el mundo desarrollado y en la Europa civilizada, menos bien entrados ya en el siglo XXI.

4.- Es mentira que defiendan a los políticos responsables. Los han criminalizado en su conjunto confundiendo deliberadamente a justos con pecadores, a ejemplares con incompetentes, a formidables gestores con ladrones y gorrones, negándose por añadidura a condenar casos flagrantes de corrupción protagonizados por cargos públicos y sindicalistas de «la izquierda».

5.- Es mentira que defiendan a quienes están sufriendo la crisis. Sus salvajes estragos han generado pérdidas extraordinarias a honrados comerciantes que luchan cada día por sobrevivir y que han visto atacados sus derechos, sus libertades y sus propiedades con daños calculados en decenas de millones de euros.

6.- Es mentira que quieran más democracia y que la soberanía resida en el pueblo. Propugnan, simplemente, la ruptura hacia un modelo mixto de perfiles socialistas, comunistas y anarquistas: en absoluto se sienten incómodos con experimentos como los bolivarianos, que tanto daño han hecho a las sociedades abiertas.

7.- Es mentira que sean pacifistas. Han cruzado la línea de la desobediencia civil o la objeción de conciencia, ejerciendo la violencia a través de tácticas de guerrilla urbana que en casos concretos como en Cataluña han representado una verdadera vergüenza nacional.

8.- Es mentira que crean implacablemente en el sufragio. Si no hubiese partidos de su gusto a los que poder votar, ya habrían fundado uno (superando su pereza y trascendiendo sus alborotos) para poder ejercer un derecho político y constitucional sagrado en la modernidad.

9.- Es mentira que se rebelen contra toda forma de injusticia social. Carece de toda justicia que, en su obsesión por privatizar los espacios de todos por la vía de los tenderetes, hayan hurtado a compatriotas corrientes y molientes de su libertad de movimientos llegando a dañar la propia salud pública.

10.- Es mentira que sean solidarios. Si así fuese, no estarían ocupando las plazas de España sino, de forma callada, ayudando a servir platos de sopa a los hambrientos y los pobres que se multiplican cada día en este país y encuentran el amparo en organizaciones vinculadas a la Iglesia.

11.- Es mentira que sean apartidistas. Sencillamente se oponen a «algunos» partidos que no son de su agrado: los que propugnan, con mayor o menor acierto, programas de gobierno socialdemócratas, liberales o conservadores.

12.- Es mentira que se organicen de forma horizontal. En la planificación, la ejecución y el control de sus acciones se rigen, en última instancia y en los momentos decisivos, por patrones verticales de corte soviético.

13.- Es mentira que se rebelen contra toda forma de impunidad. Se han esforzado en cortocircuitar las penas y las multas para muchos de los que, más allá de las soflamas de turno, han perpetrado delitos tipificados en el Código Penal.

14.- Es mentira que representen lo que la mayoría piensa. Sus acólitos no se miden por millones ni en las calles (como se comprueba ya estos días), ni en los registros de firmas de sus manifiestos (basta con acceder a sus páginas en internet).

15.- Es mentira que sean inconformistas. Hay que ser mansos y oportunistas para generar estallidos de rebeldía sólo cuando el calendario y el buen tiempo lo ponen en bandeja.

El origen de tanto truco y trampa, de tanta trola, es uno y claro. Como aquel infausto presidente del Gobierno del que se libró España no hace tanto tiempo, los mariachis del 15-M entienden que la libertad los hace verdaderos. Ignoran que es la verdad la que nos hace libres.

De la protesta a la política sin renegar

Surgió de forma espontánea, propiciado por el descontento con la ley Sinde, pero el movimiento «indignado» –que proclamó en su nacimiento su intención de rebelarse contra la clase política, con la que no se sentían representados– ha degenerado en su primer año de vida precisamente hacia las ideologías más propias de la izquierda radical. Si ya tras su primer mes de acampada se constató que el movimiento no estaba formado sólo por descontentos con el sistema español, hoy, un año después, uno de sus primeros cabecillas está sentado en el Congreso como diputado de Izquierda Unida por Málaga. No es el único caso. Las diferencias sobre qué rumbo tomar han dividido también a la cúpula de Democracia Real Ya.

viernes, 13 de enero de 2012

AHORA ANDALUCÍA

El gobierno socialista de Griñán es la perfecta encarnación de un proyecto agotado y paralizado por su incapacidad de hacer frente a la lacra del paro y de ofrecer respuestas ante el escándalo de los ERES falsos, el mayor de la historia democrática andaluza. Frente a la opción terminal de los socialistas, el PP andaluz ofrece un proyecto coherente y riguroso basado en propuestas para la creación de empleo y la regeneración de la vida política de Andalucía.